Nuestra Historia

Acrillam nació de un sueño: transformar recuerdos en luz.

Todo comenzó en un pequeño espacio de nuestro hogar, con la idea de crear algo más que productos. Queríamos diseñar detalles con alma, capaces de tocar corazones.

Inspirados por el poder de una imagen y el valor de un mensaje sincero, fuimos perfeccionando nuestro trabajo hasta convertirnos en una marca que hoy llega a cientos de hogares, llevando un pedacito de emoción en cada lámpara.

Con esfuerzo, amor y compromiso, pasamos de hacer los primeros pedidos a mano, a contar con un equipo que nos acompaña para diseñar, crear y brindar una experiencia personalizada a cada cliente.

Y aunque hemos crecido, no hemos perdido la esencia: cada pieza sigue siendo única, como la historia que representa.

En Acrillam, seguimos trabajando con el mismo propósito que nos inspiró desde el primer día: iluminar momentos, guardar recuerdos y regalar emociones.